Se respira alegría, la de estar juntos.

Así es. En mi clase se respira alegría, la de estar juntos. La demostramos día a día, porque a veces hay conflictos (¿dónde no los hay?)y  siempre volvemos a ser amigos. Es señal que están creciendo.

La alegría se considera una de las emociones básicas, junto al miedo, a la tristeza, al asco, enfado y sorpresa. Nos preocupa mucho que nuestros niños y niñas estén bien sostenidos emocionalmente, y cuando aparece el enfado tan común en estas edades, se intenta trabajar con él , para que adquieran desde pequeños a regular sus emociones. Pero,¿ y la alegría?  Ya sabéis que me pre-ocupo mucho de su desarrollo emocional, entonces me  detengo un momento a pensar sí en nuestra clase, se respira alegría, la de estar juntos. La alegría provocada por vernos, por ser amigos, por querernos, por quererse, y porque no por estar en el cole. (Lástima que no dura tanto tiempo en su vida como estudiantes…).Mi voz interior me ha contestado, ¡cómo han crecido en tan solo unos meses! ¡y cómo les voy a extrañar! (snif). Entonces voy a contar porque estamos tan alegres cuando estamos juntos.

Lo están por varios motivos:

-Porque se dan cuenta que cada vez son más autónomos, que han aprendido a colgar su mochila, dejar su toalla y vaso los lunes, ir solos al baño, ayudarse para abotonarse los» babys»  y sobre todo porque también han aprendido a pedir ayuda cuando la necesitan, aspecto muy importante en su desarrollo. También han aprendido a buscar su almuerzo, a comer casi todo lo que pone mamá o papá para este momento, y les encanta y sorprende mucho cuando ven que su amigo ha traído el mismo yogur o el mismo relleno en el bocadillo. Podría contar muchas cosas que pasan en el momento del almuerzo y que los adultos deberíamos estar con las orejas y los ojos bien abiertos. Es una ventana a este mundo que se llama : crecimiento.

-Porque se preocupan y mucho, cuando nuestro amigo o amiga, en el momento de asamblea y de rutinas emocionales expresan su tristeza. Pero han aprendido a ofrecer consuelo, palabras bonitas y abrazos espontáneos. No les gusta que aunque la tristeza sea normal, nos visite muy a menudo. ¡Ya habrá tiempo cuando sean adultos!

-Porque los viernes son especialmente mágicos y divertidos. El  llamado «viernes de arte” les ha permitido no solo conocer otros materiales (masas divertidas, tijeras y pegamento, espuma de afeitar, tapas para estampar, acuarelas …) sino lo más importante: dar rienda suelta a la imaginación, no tener miedo, ser atrevidos con los colores, tocar, mezclar, y sobre todo ser creativos ( ¿hará falta seguir un libro para hacer arte? ). -Porque les encantan los cuentos, los suspensos, imaginar todo lo que sucede en los relatos. Porque son capaces de contar y renarrar.

-Porque les inquieta cuando la “Vaca Lola” no les saluda y la llaman para que reparta   besitos o cosquillitas para saludar.

-Porque han aprendido a preguntar ¿cómo te sientes hoy? Y sobre todo,  porque están aprendiendo a escuchar.

-Porque han recibido a una nueva amiga, la «mariquita Juanita» que vive en un jardín y por eso le gusta tanto las flores. Porque les  está enseñando muchas historias y sobre todo les está ayudando a aprender a  pensar.

-Porque están muy motivados con las letras no solo las de su nombre sino otras, las de nuestros compañeros, la de papá, de mamá o de algún hermano. Porque ya las reconocen y cuando juegan con las tapas y pinzas de la ropa ( gracias a las familias) pueden componer su nombre, o pedir ayuda para poner otras palabras. (¿porqué enseñar la “A” primero sí ya descubrieron la “R” de Rosella?)

-Porque se dan cuenta que cada vez pintan mejor. Porque han descubierto que el color negro se puede utilizar como cualquier color, es uno más, y son libres si tienen ganas de pintar negro. Ya saben que si se exceden en su uso, pueden arruinar su dibujo porque no se verá.(antes que prohibir, enseñar…)

-Porque les encanta escuchar y aprender la letra de » Valientes» y han comprendido que feo es estar solo por culpa de otros. Que vale “chivarse” porque significa que somos valientes. (Porque prevenir  el acoso se enseña desde pequeños)

-Porque cuando están nerviosos, intranquilos es mejor respirar tres veces, decir alto, intentar pensar qué nos pasa  o ir al “rincón de la paz” para que sus amigos (Juan y Juanita) u otros cojines  ( de corazón , de emoticones) les ayuden a relajarse.

Estoy alegre porque aunque hayan días más complicados, aprenden a resolver los conflictos, aprenden a que son un equipo y sobre todo a que son amigos. Aprenden que a pesar de las diferencias se quieren, y aprenden que en un espacio libre sus emociones también lo son. Aprenden que son niños y niñas de tres años felices…